Nadie es perfecto, pero ellas rozan la perfección. Las dos han logrado dejar con la boca abierta a todos esos seguidores que no pararon de meterse al canal de Youtube de Thalía para ver si ya estaba subido «Lindo, pero Bruto». Con una originalidad que no recuerda a otros artistas, una sensualidad que enmudece a cualquiera y una máquina tecnológica con la que pareciera que nos encontramos ante una película futurista, las reinas del pop latinoamericano han cumplido su objetivo.
La canción perteneciente a «Valiente», el último disco de la diva mexicana prometía ser un éxito rotundo y más si cuenta con el talento de Lali Espósito. El sonido se publicó hace pocos meses y en muy poco tiempo alcanzó 2.000.000 de reproducciones en Youtube. Nadie esperaba que juntas causaran una explosión de energía y mucho menos que hicieran una crítica a la superficialidad combinándolo con el empoderamiento femenino. Este hecho ha sido muy comentado por algunos medios de comunicación que han puesto en sus titulares el concepto polémico para hablar de la colaboración entre la cantante argentina y Thalía.
«Cuántos años han pasado para que una canción como esta aparezca. El rol ha sido totalmente al revés, las mujeres estamos más fuertes, unidas en todos los ámbitos, una de cal por las que van de arena», así se expresó Thalía sobre «Lindo, pero Bruto», esa canción en la que son ellas y no ellos las que tienen el poder de decidir con quién quedarse. El sentido del humor es una de las grandes cualidades de este videoclip que en cuestión de horas ha superado el millón de visitas y que debería llegar al billón en poco tiempo. Las artistas latinas son dos clones que tuvieron una química impresionante durante las grabaciones de este tema musical lleno de color.
Hicieron click al conocerse personalmente. Ambas son perfeccionistas. Su escuela fue la televisión. Su complicidad se puede visualizar con «Lindo, pero bruto». Lo que no se le ocurre a una pasa por la mente de la otra. Son espontáneas y están en cada detalle de sus temas musicales. Son guapas por fuera, pero mucho más lo son por dentro. Sus noblezas se aprecian en la forma que tienen de tratar a sus propios fans. Son conscientes de sus raíces. Llevan a lo más alto del escalafón a Argentina y México con su arte.
Emoción y orgullo son las palabras clave que han experimentado los fans de Thalía y Lali Espósito el 30 de enero. Ha sido un día de promoción conjunta en el que ambas han compartido junto a sus seguidores la alegría de salir en uno de los edificios del Times Square de Nueva York. Quién le iba a decir hace unos años a la actriz argentina que en su adolescencia cantó las canciones de la reina del pop latino que colaboraría junto a ella en una canción a lo grande. Quién le anticiparía a Thalía que encontraría en Lali a su otra mitad musical. Quizás, cuando cada una tenía su propio grupo musical, ni siquiera se imaginaban que su música sería escuchada en cada rincón del mundo.
En la actualidad, las dos son mujeres trabajadoras que no han parado de luchar hasta llegar a la cúspide de sus sueños. Sus abrazos y sus miradas cómplices hablan por sí solos. Se comunicaron a través de Instagram y desde ese entonces se admirarían mutuamente, aunque Lali tuvo a Thalía muy presente desde siempre cuando la cantante mexicana ya había conquistado al mundo con sus canciones. Se llevan 20 años, pero sorprende ser testigo de sus similares historias. Las telenovelas les ayudaron a ambas a darse a conocer y demostrar su gran talento interpretativo. A más de dos décadas, sus seguidores recuerdan con nostalgia a esa chica que no dejaba de aparecer en la televisión de sus hogares con su trilogía de las Marías o que conquistó a todos con la dulzura de Rosalinda.
No obstante, las lalitas no se olvidan ni de la primera aparición de Lali con tan solo 10 años, ni de Robertita o de Mar en ‘Casi Ángeles’, personajes inolvidables con los que crecieron de la mano. Mucho menos se les ha borrado del recuerdo a los fans esas primeras canciones de Thalía que o llegaban directas al corazón o arrasaban en las discotecas y los karaokes de multitud de países. Tampoco de la ilusión con la que Lali hizo un directo para confesar que se lanzaba como solista, esa misma cara de felicidad que sintió al presentar «A Bailar», «Soy» o «Brava». Pese al éxito obtenido, son mujeres que han reflejado sus almas en cada disco, han demostrado su humildad, han expresado sus miedos y han dado visibilidad a las injusticias, a la igualdad, así como a la diversidad sexual.
«Lindo, pero Bruto» es solo un ejemplo que critica la superficialidad de algunos hombres, pero en sus últimos proyectos musicales Thalía hace alusión (o eso da a entender la letra» a la homosexualidad con «Por amor al arte», perteneciente a su último disco «Valiente». Por su parte, «Tu Revolución» de Lali es un referente musical que utilizan muchas mujeres como grito hacia la legalización del aborto legal y seguro en Argentina. Ellas son mucho más que una canción tan explosiva y bailable que podría convertirse en el hit mundial del año. Ambas son iconos feministas y latinos que han evaporado la necesidad por encasillar en un género a los artistas. Las dos abrazan al pop, pero siempre se han adaptado a otros estilos musicales sin dejar atrás su sello propio y personal.
Argentina y México están representados en dos mujeres llenas de talento que no han hecho a un lado sus otros dones: actuar, bailar, así como ser agradecidas con su séquito de seguidores y ser honestas a la hora de elaborar cada proyecto que lleve sus nombres. Por separado ya son espectaculares, pero juntas son la bomba. No es extraño que en menos de 24 horas «Lindo, pero Bruto» ya haya traspasado el millón de reproducciones en Youtube y que esté en el top de tendencias en decenas de países. Al parecer, va a ser muy difícil no saberse este hit y no acordarse de Lali y Thalía en cada discoteca, en cada fiesta o en cada lugar que valore el arte latino.