En pleno epicentro de Madrid, a escasos metros de la Puerta Del Sol, un lugar que que acaba de ser reconstruido, ‘Ghost’ regresó para traer de vuelta un amor que va más allá de la muerte. Lo hacía el 21 de abril, justo el día que la producción de Letsgo celebraba sus 600 funciones. No obstante, esta información no la supimos hasta ver finalizada una obra que tiene unos 135 minutos de duración y una característica que la hace única, auténtica y especial respecto a otros musicales: el ilusionismo. Y sí, hablar de esta recreación teatral dirigida por Federico Bellone supone ensalzar el desafío técnico con el que recrean la escena en la que el alma de Sam sale del cuerpo, atraviesa paredes o mueve objetos. O ese momento en el que a Oda Mae se le mete un fantasma, situación que dejó atónitos a todos los asistentes que, estuvieron dispuestos a darle la oportunidad a un thriller romántico, ese que reestrenaron la tarde del 21 de abril en el Teatro Albéniz.
Eran las 18:00 de un agradable viernes de abril y una inmensa cola rodeaba un teatro que tiene aire a hotel de lujo. Ya ubicados en nuestras butacas y antes de que se apagaran las luces, una voz al megáfono informó que el mítico Sam sería representado por David Bustamante, hecho que ocasionó los aplausos de todos los presentes. Había ganas de verle nuevamente sobre los escenarios, en una faceta que no todos conocían, pero de la que todos quedaron sorprendidos. Pese a que lleva más de un año girando por toda España con este musical que le ha permitido hacer su debut como actor, Bustamante volvió a trasmitir la misma energía que esa primera vez que se metió en los zapatos de un personaje icónico, ese que en el éxito de los 90 fue representado por Patrick Swayze. Agradecido con su público, el cantante que tiene sus raíces en San Vicente de la Barquera dedicó unas bonitas palabras a todos los que se sentaron ese día a ver el sobrenatural espectáculo. Todo esto tras más de 30 años de la historia cinematográfica que enamoró a billones de personas. Así es como España revive un thriller que reabría sus puertas 21 de abril en la capital madrileña para cumplir su cometido; contar un amor que trasciende todos los límites y que sobrevive más allá de la muerte.
Cuerpos que se esfumaban en el aire, besos apasionados e intensos que parecían tener principio, pero no final, fantasmas que atravesaban paredes, apariciones de dobles, desapariciones, espíritus que se reencarnaban en personas que habitan el espacio terrenal. ‘Ghost’, el Musical recoge todo eso con esas canciones adaptadas por Dave Steward y Glen Ballard y mucho más. La magia reside en esta obra que capta la esencia de la película de los 90 con un elenco totalmente renovado que pisa fuerte el escenario desde los primeros minutos. Cabe mencionar a Ana Dachs, quién relevó a Cristina Llorente en el papel de Molly, esa amada de Sam que sufre enormemente la partida de su eterno enamorado, la misma que deja un mensaje contundente: El ahora es muy importante para decirle a esa persona que tienes en frente todo lo que la quieres porque nunca sabes hasta cuando el tiempo será lo suficientemente generoso. Tampoco podemos olvidarnos de Christian Sánchez en el personaje de Carl, ese amigo traicionero de Sam que en sus ansías de poder le arrebata la vida.
‘Ghost: El Musical’ es mágico por su gran puesta en escena, sus espectaculares coreografías y su manera de recrear el Nueva York de los años 90; desde sus calles, el metro, el consultorio de Oda Mae hasta la casa de Sam y Molly, pero también es comedia y diversión. Todo gracias a Ela Ruiz, quien monopoliza la obra con su lado cómico y grandilocuente de expresarse, pero también con esas actuaciones dignas de ser aplaudidas por crítica y público. Si hay que elevar a la máxima potencia a uno de los intérpretes lo hacemos con ella; por su calidad vocal, su manera de moverse con soltura por todo el escenario y por sacar gran parte de las risas de un thriller en el que conseguía transformar el humor negro en auténtica comedia. Ella se mete en la piel de Oda Mae, la falsa pitonisa que engaña a sus clientes haciéndoles ver que habla con los espíritus hasta que escucha verdaderamente la voz de Sam, un alma que tiene como misión salvar a su amada Molly de las garras de su cruel amigo Carl.
Con un trasfondo fantástico y sobrenatural, es necesario matizar que sólo nos metemos en la famosa historia de amor que dio la vuelta al mundo en los 90 por momentos. El agente del banco estadounidense está bien representado por David Bustamante, aunque habría que ver a Ricky Merino, quién comparte el personaje de Sam con el cantante de origen cántabro. La Oda Mae de este musical nada tiene que envidiar a la gran Whopi Goldberg y para ser un directo, los efectos especiales dejaron con la boca abierta a más de un asistente. Muchos se preguntaron con cierta sorpresa cómo podían haber hecho efectos bastante creíbles in situ. Sin embargo, no podemos decir lo mismo de la banda sonora. «Unchaimed Melody» , la mítica canción que todo el que compra una entrada está ansioso de escuchar en su máximo esplendor aparece de manera escasa puesta en una radio, minutos antes de que el personaje de Sam cante un pequeñísimo trozo. Por otro lado, la escena más esperada en la que Molly sumerge sus manos en arcilla y el espíritu de Sam está con ella, tampoco es lo suficientemente apasionada y creíble como para que se nos pongan los pelos de punta.
Aún así y pese a que ‘Ghost, el Musical’ peca al mezclar diálogos con una música que lejos queda de esas canciones que residen en el imaginario colectivo de todos los que vimos la película de Patrick Swayze, esta obra sobresale por su reparto, su prodigiosa parte técnica que dota de ilusionismo logrado y su sublime manera de llevar el hilo conductor de una trama en la que un hombre enamorado que ha fallecido pretende comunicarse con su amada para protegerla del peligro que le acecha. Con más de 600 funciones a sus espaldas y tras haber pasado de la Gran Vía madrileña al Teatro Albéniz, ‘Ghost’ es un buen regalo visual para todos los que quieran reír y revivir el amor que dos almas de dos mundos distintos se profesaron más allá de la vida y de la muerte.
David Bustamante como Sam en ‘Ghost’:
Mayo: viernes 5 a las 18h, domingo 7 a las 18h, miércoles 10 a las 20.30h, jueves 11 a las 20.30h, jueves 18 a las 20.30h, viernes 19 a las 18h, sábado 20 a las 21.30h, domingo 21 a las 18h, jueves 25 a las 20.30h, viernes 26 a las 18h, sábado 27 a las 21.30h y domingo 28 a las 18h.
Ricky Merino como Sam en ‘Ghost’:
Mayo: viernes 5 a las 21.30h, viernes 12 a las 21.30h, sábado 13 a las 18 y 21.30h, domingo 14 a las 18h, lunes 15 a las 18h, viernes 19 a las 21.30h, sábado 20 a las 18h, viernes 26 a las 21.30h y sábado 27 a las 18h.