A punto de cumplir los 25 años de trayectoria en la interpretación, Alejandra Barros no ha dejado de demostrar su versatilidad para meterse en la piel de seres humanos complejos con sus luces y sombras. La actriz mexicana, quién también tiene nacionalidad española, es una mujer apasionada por su profesión y asume cada reto con la felicidad de trabajar de lo que ama. En una entrevista para Veo, Escucho y Os Cuento, la intérprete que está de promoción con su último largometraje titulado «Ni tuyo, ni mía» recordó a su padre, quién siempre se cuestionó cuánto tiempo llevaba en la actuación debido a que desde que era bien pequeña ya era toda una revolución artística para su familia. No obstante, su primera oportunidad llegó en 1997 con ‘Huracán’, telenovela para Televisa protagonizada por Angélica Rivera, con quién tiempo después coincidió en su primer papel como protagonista.
«Hay bebés a los que les pusieron Mariana por esta telenovela y hoy en día son fans. Fue un proyecto en el que sacrifiqué mi vida personal porque mi hijo estaba muy pequeño. Ayer estaba en el campo de golf y las personas que trabajan allí me saludan y me dicen, Marina cómo estas», reveló sobre ‘Mariana de la noche’, esa producción exitosa del año 2003 que Alejandra Barros protagonizó junto a Jorge Salinas, la misma que ha vuelto a emitirse en el canal de telenovelas en México en medio de la pandemia. «Tengo un proyecto basado en las primera dama mexicana. Se suele hablar del presidente, pero no de la esposa y estamos haciendo Mónica Lozano, Claudio Carrera y yo como productores basado en una idea original de Claudio y mía», confesó sobre su faceta como guionista de ficciones.
«Muchas veces la realidad supera a la ficción. De hacer a las buenas, Carlos Moreno me dio la oportunidad de hacer esta villana. Julieta Olmedo fue un personaje fuerte porque hubo momentos desquiciados y pude manejar las armas, pero hubo gente que me decía que me odiaba», declaró la intérprete que valora que no la hayan encasillado en una personalidad concreta para la interpretación. Anteriormente a ‘A que no me dejas’ de 2015, Alejandra Barros caracterizó a Bárbara en ‘Para volver a amar’ y revivió que tuvo que batallar con los responsables de la producción para que le dejarán hacer ese casting. Así fue como gracias a su ímpetu por quedarse con ese papel consiguió meterse en la piel de una mujer que sufrió violencia de género y se contagió de VIH. «En Mujeres de Negro hacía una mujer que tomó la venganza en sus manos. Además era buena y fumaba. Antes sólo a los villanos les daban esa posibilidad», reconoció.
«Había escenas que no podía parar de llorar. Había momentos que me tenían que dar un tiempo para tranquilizarme. La situación me pudo», recordó sobre ‘Y Mañana será otro día», telenovela protagonizada por Diego Oliviera y Angélica Vale. Esta fue su última producción al lado de Televisa y pronto se incorporó a las filas de Telemundo con Eleonora, personaje que interpretó en la segunda temporada de ‘La Doña’. «Televisa interrumpió antes de tiempo mi contrato de exclusividad. Anteriormente no podías hacer ni una entrevista en otra televisora. Cuando llegué a Telemundo fue como entrar en una escuela nueva en la que me recibieron con un gran cariño». Alejandra Barros explicó que notó el cambio abismal de las historias por ser mucho más arriesgadas, pero valora esta oportunidad que se extendió con ‘Buscando a Frida’, ficción en la que se ha metido en la piel de Rafaela Pons. «Va a llegar a España. Estén pendientes con los actores del elenco. Por Internet llegó a muchos lados de manera oficial y extraoficial», comentó en exclusiva para Veo, Escucho y Os Cuento.
«Es una historia de amistad que bebe de la comedia romántica. Habla también de los proyectos a largo plazo en pareja. Exploro la comedia que es algo que no me suelen dejar hacer», detalló Alejandra Barros sobre la película «Ni tuyo, ni mía». «Mi filosofía consiste en hacerte responsable de tus actos y a disfrutar sin hacer daño al de al lado. Trato de llevar una vida individual, pero aporto lo que quiero recibir. Además, el respeto es muy importante que parece que se ha roto. Por otro lado, si pudiera pedir algo a un genio le pediría que mi hijo sea feliz», finalizó una intérprete que ha sido parte de decenas de telenovelas con las que han crecido distintas generaciones de diversos países.