En esta ocasión no han hecho falta los vestidos de quinceañera, ni los hastags con tonos pijos, ni tampoco ese violín que conquistó a los seguidores de Paulina Goto hace un año. Esta vez la actriz ha necesitado cambiar su ropa con agujeros por un chandal y unos tenis y aunque el acento de Victoria es muy similar al de Luisa Fernanda y su actitud de niña inocente se ha mantenido intacta, Paulina ha demostrado que puede transformarse en ese personaje que sueña con correr casi como un águila para que su país y sus seres queridos se sientan orgullosos de sus triunfos.
Sin embargo, hay obstáculos que le impiden cumplir su sueño. Muchos televidentes, por no decir todos, tienen cierto resquemor a Andrés, personaje interpretado por Manel de la Parra que tiene una obsesión enfermiza y que fuerza psicológicamente a Victoria para que se case con él y así conseguir que ella se aferre a esa vida en la hacienda Santibáñez que él le ofrece. Sin embargo, las manipulaciones y engaños de su madre (Susana Dosamantes) consiguen que el personaje de Paulina se distancie definitivamente de Andrés y corra sin saberlo a los brazos de Raúl de la Peña (Andrés Palacios).

Tras ver los primeros veinte capítulos de la adaptación de ‘Como tú ninguna’, se puede comprobar que es la clásica telenovela de Televisa en la que la chica pobre y desamparada tiene un amor de infancia y un amor prohíbido. También sufre carencias por una madre que le abandonó cuando era un bebé y que le está buscando desesperadamente y cuenta con una amiga que tiene una discapacidad en el oído tras sufrir un grave accidente. Además, se sabe que el triángulo amoroso para recrear el conflicto y la tensión de las historias no falla en ninguna telenovela y ese es uno de los puntos álguidos de la producción de Nathalie Lartilleux.

No obstante, si hay algo que consigue enganchar a los espectadores es la disciplina que Don Clemente le imparte a Victoria, el esfuerzo de su mamá negra para que su hija adoptiva cumpla su sueño, el sufrimiento de su madre biológica por haberla abandonado, la soledad que siente Raúl de la Peña en un principio por no encontrar el amor verdadero y la enfermedad de la bipolaridad vista en el personaje interpretado por Ana Lorena Elorduy. A todas estas características diferenciales hay que sumarle que el personaje de Paulina Goto no tiene que depender de un hombre para ser alguien en la vida. Victoria es una mujer independiente que por medio de su trabajo y empeño sale adelante.

A esta producción que al final no cuenta con la participación de Pablo Montero, se sumaron René Strickler y Jorge Aravena, dos actores que con sus personajes en ‘Un camino hacia el destino’ habían ejercido de padre biológico y padre adoptivo de Paulina Goto. Además, la protagonista de ‘El vuelo de la victoria’ vuelve a trabajar con Juan Pablo Gil después de que ambos fuesen la pareja juvenil en la telenovela ‘Mi corazón es tuyo’.