Un año y medio después volvimos a emocionarnos como la primera vez, como ese momento en el que le vimos en los castings de ‘Operación Triunfo’ a punto de ver nacer a su «quimera». Escucharla es ahora más que nunca como volver a casa, despojarnos de «la culpa» y comenzar a sentir con «dignidad» lo que ya no podemos ocultar o callar por miedo al que dirán. Lo vimos venir desde 2018 porque el éxito de Alba Reche era evidente. No sólo por esa voz tan particular que desgarra las almas. También por su estética y su magnética manera de ser, esa que conquista a todos los que comienzan a saber de su existencia. La cantante alicantina ha regresado con un trabajo discográfico formado por ocho canciones que tienen su esencia plasmada y mantienen un equilibrio emocional. Nada se parece a su proyecto antecesor. Parte de cero y deja en el pasado la mitología griega para abrazarse a la naturaleza.
Desde ese «Pido Tregua» en el que Alba Reche se enfrenta con su mala influencia para transmitir un mensaje de protesta que afirma la necesidad por luchar por ser uno mismo y no dejarse corromper por nada a ese «Que Bailen» en el que enfunda su poderosa voz con la de Cami Gallardo para despertar a los inconscientes, esos que prefieren callar a ver la dura realidad en la que realmente viven. Aferrada a abanderar todo lo que esté a favor de la igualdad de género, la diversidad y la libertad, la artista procedente de Elche ha sembrado su «pequeña semilla», esa que germinó hasta poder ver la luz definitivamente el 26 de marzo ante miles de ojos que han escuchado su mayor obra maestra hasta la fecha. Con una melodía capaz de atrapar a las musas y a los que sólo quieren una banda sonora con la que poder sentirse identificados, Alba da rienda suelta a «la culpa» acompañada por unos sonidos potentes a modo de baterías que paran para dar paso de nuevo a su alma elevándose a través de la música.
«Esta noche salen muchas cosas, entre ellas, un segundo trabajo hecho con mucho cariño que espero que disfrutéis de corazón. Gracias por el camino andado y que os quiero». Esas han sido las palabras de Alba Reche en sus redes sociales minutos antes del lanzamiento de «La pequeña semilla», una mujer empoderada que cada vez tiene más claro la música que define su sello, que no se deja vender por lo comercial, que innova desde sus sentimientos y su verdad con ciertos mensajes subliminales que sólo pueden descifrar quiénes conocen su interior. «Los cuerpos» es esa primera colaboración de este EP, una canción que transmite paz en la que la cantante empasta muy bien con Fuel Fandango. Tras este tema musical llega «Escúchala» junto a Cantamarta, una historia que trae la nostalgia de un pasado lejano. Una nana que se clava y pellizca el corazón para coronarse como una balada que conmueve hasta las lágrimas.
Nadie que haya podido tener la suerte de escucharla en los conciertos querrá domar a este ser luminoso hecho de arte desde que nació. De baladas intimistas como «la dignidad» en la que se despide de un amor que le ha hecho daño y al que quiere lejos, pero con ciertos guiños a esos momentos sobre los escenarios al éxtasis de «Flor Alta». Esta es quizás una de las favoritas del público por ser una creación innovadora que recoge su voz más sonada con sus frases en valenciano, esas que colman de sensualidad una canción que tiene impresa su energía. Con ella, Alba Reche confiesa que al cerrar los ojos divisa a lo lejos la autopista de Valencia y siente que vuelve a casa. Por otra parte, sus fans ya la han puesto en el top de sus tres mejores creaciones y ya sueñan con su directo.
«El desarme» llega para desnudarnos emocionalmente, para protegernos de nuestros miedos y volar a su nueva «quimera» titulada «pequeña semilla» sin soltarla jamás. Así es como Alba Reche ha conseguido superarse a sí misma como compositora y cantante, con una versatilidad inigualable que en la que se deja escuchar lo electro y ese folclore que resiste en sus canciones más célebres. Su trabajo es un viaje con lo acústico y lo más candente en el que se siente con más independencia para mostrar aquello que no pudo contar anteriormente. La cantante que ama las artes y realiza sus propias maquetas logró que su EP se agotara en la preventa, por lo que no podemos imaginar lo que está por suceder con este proyecto musical digno de pisar multitudes de escenarios, así como de convertirse en la nueva nominación a los Grammys Latinos.